“Las personas suelen utilizar la tecnología antes que las empresas y eso nos da el empuje para acelerar nuestros procesos de innovación”. Así definió Luciana Barrera, directora de Operaciones y Procesos Transversales de Movistar, cómo la empresa mejora sus servicios prácticamente a diario, siguiendo las necesidades de los clientes.
Barrera formó parte del capítulo 9 de Innovación, una charla organizada por La Nación de la que también formaron parte Eduardo Martínez, director de innovación y tecnologías de Raizen Argentina; Bárbara Pozzi, directora de planta Tortuguitas de Unilever; Gonzalo Velazco, gerente general de Logística de la Serenísima; e Ignacio Bidart, CIO de Mercedes-Benz camiones y buses Argentina.
Los ejecutivos coincidieron en que la innovación está revolucionando el panorama empresarial global, cambiando las reglas del juego para las compañías.
Ahora no solo deben innovar para sus clientes sino además redefinir su cultura laboral, enfocándose en la flexibilidad, la agilidad y la diversidad como pilares de su propuesta de valor.
En ese escenario, la creatividad y la tecnología se retroalimentan como nunca antes.
“Movistar es una compañía tecnológica donde implementar la innovación es algo natural”, detalló Barrera a La Nación.
Agregó que para poder innovar, lo mejor es contar con un ambiente colaborativo, donde la empresa proporcione el espacio para pensar y entender que “estamos produciendo el servicio de mañana”.
Aprender del error
Los participantes de la mesa coincidieron en que la innovación va de la mano del cliente, quienes marcan tiempos y necesidades.
Barrera remarcó que “las personas suelen utilizar la tecnología antes que las empresas, por lo tanto eso nos da el empuje para acelerar nuestros procesos de innovación”.
Agregó que la innovación sin error no existe: “La clave de la equivocación es aprender y corregirlo rápido. Y para ello están las tecnologías. Todos los días podés chequear lo que creás y, particularmente a Movistar, esto le permite sacar muchos más servicios y productos de los que ofrecía antes y sobre todo, mejorar los procesos de cara al cliente”.
La revolución de la IA
La tecnología permite entonces acelerar procesos y brindar nuevas experiencias a los consumidores, algo que parece se acelerará sin pausas gracias al uso de Inteligencia Artificial, cada vez más presente en todos los ámbitos.
Esa tendencia no debe asustar ya que el secreto radica en el uso que el humano le dará.
Barrera destaca que, “si la implementamos como un medio para lograr resultados y la intención es buena, entonces la IA solo puede ayudar”.
No obstante, “tenemos que ser muy cuidadosos y validar que la decisión tomada por una máquina sea la correcta”.